Por fin, y antes de lo previsto, ya podemos empezar a disfrutar de las setas y los hongos en nuestros alrededores. Este año las nubes se han portado bien, descargando cuando debían y el monte, ante todo agradecido, nos premia con lo que promete ser una excelente temporada de recolección.
Por favor, quiero recordaros que para recolectar los “hongos” se deben seguir unas pautas necesarias para nuestra seguridad y para la supervivencia de los mismos.
Lo primero, asegurarnos de que lo que estamos cogiendo lo conocemos a la perfección para de esta forma evitar posibles intoxicaciones.
Utilizar un cuchillo o navaja para cortar las setas a ras del suelo. Nunca un rastrillo o similar para “revolver” entre las agujas de los pinos. Si lo hacemos así podemos estropear el micelio o simiente de la seta.
Utilizar un recipiente con el fondo poroso para que las setas recogidas puedan soltar sus esporas (semillas) y de esta forma contribuyamos a su reproducción. Lo ideal es un cesto de mimbre o similar. Nunca se deben utilizar cubos o bolsas de basura. Sobre todo estas últimas suelen degradar nuestra “cosecha” debido al mal trato que sufren las setas durante su recogida.
Coge las que vayas a consumir. Una recogida excesiva por parte de muchos contribuye a que cada año los hongos sean mas escasos y pone en peligro futuras satisfacciones.
No destroces las que no conozcas, todas las setas tienen una importante función en el medio natural. Muchas especies vegetales viven asociadas a las setas y de estas depende en gran parte su buena salud.
Respeta los cotos y sigue las indicaciones de la guardería forestal.
Si podemos evitar andar pegando berridos pues mejor que mejor, en estas épocas la afluencia de gente a la sierra es mayor y los pobres animales no tienen por que sufrirlas mas de lo necesario.
Por último tenemos algo que aunque es cuestión de unos pocos, hay que ver lo que se nota y que mal cuerpo te deja. La basura. Intenta cuando dejes tu zona de recolección que no se note que has estado allí. No cuelgues basura de los árboles ni la abandones en el campo. No nos cuesta nada transportarla hasta el contenedor mas próximo evitando de esta manera que los animales abran y esparzan nuestros desechos.
La mayoría de los recolectores siguen estos consejos. Recuerda además que en muchos lugares muchos son ley y no cumplirlos puede tener como consecuencia una sanción por parte de las autoridades encargadas de vigilar el monte.
Y dicho esto, a disfrutar de la temporada. Buena suerte a todos.